Starlink ha causado expectativa luego de empezar la puesta en órbita de una constelación de satélites que promete brindar internet a cada rincón del planeta.
El internet satelital no es una novedad, sin embargo la cobertura de los anteriores proveedores estaba limitada a ciertas regiones del planeta y con precios poco asequibles. Ahora la compañía de Elon Musk planea dentro de poco tiempo tener una cobertura de alcance global que le permitirá manejar precios más bajos.
SpaceX lanzó el jueves un cohete Falcon 9 desde Florida, llevando 49 satélites Starlink al espacio. El plan de la compañía es construir una red de Internet interconectada con miles de satélites diseñados para ofrecer Internet de alta velocidad. La empresa del multimillonario tiene en la actualidad alrededor de 1.800 satélites en órbita.
La ingeniera de SpaceX, Jessie Anderson, dijo durante un webcast del primer lanzamiento de la compañía en 2022, que ahora cuentan con más de 145.000 usuarios en 25 países. Eso es más de los 140,000 que tenían a principios de noviembre, sin embargo el aumento de 5.000 usuarios en dos meses representa una ralentización del crecimiento. Hasta noviembre, SpaceX había agregado aproximadamente 11,000 usuarios por mes desde que comenzó el servicio en octubre de 2020.
A fines del año pasado, SpaceX señaló en su sitio web que “la escasez de silicio ha retrasado la producción” de los terminales de usuario de Starlink, “lo que ha afectado nuestra capacidad para cumplir con los pedidos”.
La valoración de SpaceX se ha disparado más allá de los 100 billones de dólares, lo que los analistas de la industria atribuyen en gran parte al potencial de mercado que tiene el servicio Starlink.
En algunos lugares del planeta ha generado revuelo el avistamiento de una seguidilla de luces en perfecta formación surcando el cielo, lo cual se ha vuelto frecuente luego de cada lanzamiento.