Las nóminas no agrícolas aumentaron en 223,000 en diciembre, es decir, por encima de la estimación del Dow Jones que era de 200,000.
Por sectores, ocio y hostelería lideran con 67,000 puestos de trabajo añadidos, seguidos de sanidad (55,000), construcción (28,000) y asistencia social (20,000).
Non Farm Payrolls (NFP), o Nóminas No Agrícolas en español, es un indicador económico que muestra el cambio en el número de trabajadores en EE.UU. excluyendo a los empleados públicos, de entidades sin ánimo de lucro, de hogares privados y trabajadores agrícolas.
La tasa de desempleo cayó al 3.5%, 0.2 puntos porcentuales por debajo de la expectativa. El crecimiento del empleo marcó una pequeña disminución con respecto a noviembre cuando se situó en 256,000.
A pesar que las nóminas no agrícolas se desaceleraron en diciembre, aun así fue mejor de lo esperado, una señal de que el mercado laboral se mantiene sólido incluso cuando la Reserva Federal intenta frenar el crecimiento económico.
Entre tanto, el crecimiento de los salarios fue menor de lo previsto, lo cual deja ver que las presiones inflacionarias podrían estar debilitándose.
Las ganancias promedio por hora aumentaron un 0.3% en el mes y un 4.6% respecto al año anterior. Las estimaciones eran de 0.4% y del 5%, respectivamente.
Los futuros del mercado de valores subieron tras la publicación, ya que los inversores buscan señales de que el panorama laboral se está enfriando y reduciendo también la inflación.
La fortaleza relativa en el crecimiento del empleo se produce a pesar de los repetidos esfuerzos de la Reserva Federal para desacelerar la economía, en particular el mercado laboral. El banco central elevó su tasa de interés de referencia siete veces en 2022 por un total de 4.25 puntos porcentuales, y es probable que haya más incrementos en camino.
El Banco Central Estadounidense busca cerrar la brecha entre demanda y oferta. Hasta noviembre, había alrededor de 1.7 puestos vacantes por cada trabajador disponible, un desequilibrio que se ha mantenido a pesar de las subidas del tipo de interés. La fuerte demanda ha hecho incrementar los salarios, aunque en su mayoría no han seguido el ritmo de la inflación.
Mayores salarios, significan un aumento del consumo que ocasiona un exceso de demanda sobre la oferta, esta a su vez produce escasez y todo bien escaso sube de precio (inflación) y es precisamente esto lo que quiere evitar la FED.
“Existen algunos indicios de que las cosas se están moviendo en la dirección correcta. Estamos viendo el efecto de las herramientas contundentes de la política monetaria”, dijo Mike Loewenart, jefe de construcción de cartera modelo para la Oficina de Inversiones Globales de Morgan Stanley.
“No creo que esto vaya a disuadir a la FED de algunos aumentos adicionales en el futuro, pero sin duda es alentador ver una moderación en los salarios”.
La caída en la tasa de desempleo se produjo cuando la tasa de participación de la fuerza laboral subió al 62.3%, todavía un punto porcentual por debajo de febrero de 2020, el mes anterior a la pandemia de COVID-19.