Desde 2020 se ha creado un total de $42 billones de nueva riqueza, de los cuales $26 billones, o el 63% fue acumulado por el 1% de la población, es decir los ultra ricos, dice el informe. El 99% restante de la población mundial recaudó solo $16 billones de nueva riqueza, afirmó Oxfam, organización benéfica mundial contra la pobreza.
“Un multimillonario ganó aproximadamente $1.7 millones por cada dólar de nueva riqueza global, ganada por una persona ubicada en el 90% inferior”, se lee en el informe publicado momentos antes que el Foro Económico Mundial comience en Davos, Suiza.
Sugiere que el ritmo al que se crea la riqueza se ha acelerado, ya que el 1% más rico del mundo acumuló en dos años, alrededor de la mitad de toda la riqueza nueva de los últimos 10 años.
Gabriela Bucher, directora ejecutiva de Oxfam, pidió que se aumenten los impuestos para los ultraricos y dijo que se trata de una “pre-condición estratégica para reducir la desigualdad y resucitar la democracia”.
“Imponer impuestos a las corporaciones súper ricas es la puerta de salida de las crisis superpuestas de hoy. Es hora de demoler el conveniente mito de que los recortes de impuestos para los más ricos dan como resultado que su riqueza de alguna manera se ‘filtre’ hacia todos los demás”, dijo Bucher.
En el comunicado de prensa del informe, también afirmó que los cambios en las políticas fiscales ayudarían a abordar las crisis en todo el mundo, las cuales se alimentan entre sí y producen juntas un mayor daño de lo que lo harían por separado, a esto se le conoce como “policrisis”.
El informe de Oxfam se basó en datos sobre la creación de riqueza global de Credit Suisse, así como cifras de la lista de multimillonarios de Forbes y la lista de multimillonarios en tiempo real de la misma publicación, para evaluar los cambios en las fortunas de los ultra ricos.
La investigación contrastó estas cifras con los informes del Banco Mundial, entidad que dijo en octubre que probablemente no alcanzaría su objetivo de acabar con la pobreza extrema para 2030 , ya que la pandemia de Covid-19 ralentizó los esfuerzos para combatirla.