En la carrera por encontrar combustibles más limpios, el sector de transporte de carga está lamentablemente rezagado debido a que las baterías no tienen suficiente energía para impulsar camiones y barcos. Una nueva empresa está trabajando para convertir el amoníaco en hidrógeno y con ello impulsar vehículos de gran tamaño.
La industria de camiones pesados por sí sola representa casi una cuarta parte de todas las emisiones de gases de efecto invernadero de la industria del transporte. Por su parte, las emisiones del transporte marítimo aumentaron casi un 10% entre 2012 y 2018, según la Organización Marítima Internacional. Los barcos liberan casi mil millones de toneladas métricas de dióxido de carbono cada año, lo que equivale aproximadamente a las emisiones anuales de carbono de Texas y California juntas.
Amogy, una empresa nueva con sede en Brooklyn, está trabajando en alternativas basadas en amoníaco. Uno de los inversores de esta naciente compañía es Saudi Aramco, el mayor productor de petróleo del mundo, el cual ve a este elemento como parte de su futuro.
“Nuestra tecnología patentada permite convertir de manera eficiente y efectiva el amoníaco en hidrógeno para generar hidrógeno dentro del mismo vehículo y luego usarlo para hacerlo funcionar, mediante una celda de combustible”, explicó el cofundador y CEO de Amogy, Seong Hoon Woo.
La tecnología permite el “craqueo” (o descomposición) a bordo, del amoníaco en hidrógeno, que luego se envía a una celda de combustible para impulsar el vehículo.
La densidad de energía del amoníaco líquido es aproximadamente tres veces mayor que la del hidrógeno comprimido.
Amogy acaba de probar su tecnología en un semirremolque y ya la ha hecho funcionar en un tractor John Deere y un dron.
“Nos estamos asociando con las partes interesadas de la industria del transporte marítimo y las industrias pesadas. Entonces, ciertamente la colaboración es la clave para escalar nuevas tecnologías como la nuestra, y también penetrar en el mercado”, dijo Woo.
“Realmente abre nuevos mercados para el hidrógeno a través de un vector de amoniaco bajo en carbono, por el que apostamos como una forma favorable de transportar hidrógeno”, dijo Ahmad Al-Khowaiter, director de tecnología de Saudi Aramco.
“Va a ser un mercado en crecimiento en un mundo con restricciones al carbono. Dichos productos serán más valiosos, y el mercado y la demanda aumentarán, por lo que vemos esto como muy positivo desde la perspectiva de nuestros accionistas”, agregó.
Además de Saudi Aramco, Amogy cuenta con el respaldo de Amazon’s Climate Pledge Fund, SK Innovation y DCVC. La puesta en marcha ha recaudado $70 millones hasta ahora.