Las acciones de Evergrande fueron detenidas este lunes temprano, luego que su valor cayera en más del 20% por cuenta de la noticia de que un tribunal en Hong Kong dictaminó la liquidación de la empresa.
Evergrande fue alguna vez uno de los mayores promotores inmobiliarios en China y se ha visto envuelto durante los últimos años en una fuerte crisis financiera que le ha llevado a la liquidación. Los acreedores extranjeros no lograron llegar a un acuerdo de reestructuración de última hora este fin de semana.
Las conversaciones entre la empresa y sus principales acreedores comenzaron la semana pasada, pero sin un acuerdo. Un grupo de ellos apoyó la petición existente de liquidación, afirmaron personas familiarizadas con la situación.
Con unos $300,000 millones de dólares en pasivos, Evergrande dejó de pagar sus deudas hace más de dos años y desde entonces ha estado negociando una reestructuración con las partes involucradas.
Una vez aprobada la petición, el tribunal nombrará un liquidador para la empresa matriz de Evergrande. El liquidador estará facultado para hacerse cargo de todas las filiales en todo el mundo, incluida China, y vender los activos de la empresa para pagar su deuda, aunque es conocido que muchos de los activos ya han sido vendidos o embargados por los acreedores, incluso congelados por los tribunales chinos.
Una cuestión que aún está pendiente por definir es el alcance del poder legal del liquidador de Hong Kong sobre China continental, aunque los tribunales de China han comenzado recientemente a reconocer la autoridad legal de los liquidadores con jurisdicciones como Hong Kong, donde cotiza la empresa matriz del gigante inmobiliario.
El incumplimiento de Evergrande fue un momento decisivo para el sector de la construcción en China y alimentó una crisis de liquidez en el sector. Desde entonces, más de 50 empresas de ese país han incumplido sus deudas y miles de personas han perdido sus empleos.
La crisis de Evergrande ha asestado un golpe a la economía China. El sector inmobiliario y las industrias relacionadas solían ser un importante motor del crecimiento económico del país y contribuían a alrededor de una cuarta parte de su producto interno bruto. La industria ahora está arrastrando a la economía hacia abajo y la caída del sector inmobiliario parece que se prolongará durante años.