Exxon había demandado a Arjuna Capital y a otro accionista, Follow This, en enero, buscando impedir que presentaran una propuesta climática en la reunión anual de accionistas de la petrolera el pasado 29 de mayo. Los inversores activistas pedían a la compañía que acelerara la reducción de emisiones de dióxido de carbono. La demanda de Exxon provocó críticas, ya que muchos argumentaron que podría tener un efecto paralizador sobre futuras propuestas de los accionistas.
Finalmente, El lunes, un juez federal de Texas desestimó esta demanda. El juez del Distrito Norte de Texas, Mark Pittman, dictaminó que la promesa del inversor activista de no presentar resoluciones climáticas similares en el futuro hacía que el caso fuera discutible, eliminando cualquier controversia entre las partes.
Tras la presentación de la demanda por parte de la petrolera, los dos accionistas activistas retiraron su propuesta. Sin embargo, Exxon continuó con la demanda, alegando que los inversores podrían presentar una propuesta similar en el futuro. Originalmente, el juez Pittman permitió que la demanda contra Arjuna continuara, reflejando los argumentos de la compañía. No obstante, desestimó la demanda contra Follow This, una organización con sede en Holanda, debido a cuestiones de jurisdicción.
El fallo del lunes indicó que ya no había un asunto en juego en el caso después de que Arjuna Capital hiciera una promesa “incondicional e irrevocable” de no volver a presentar una propuesta similar. En su fallo, el juez Pittman destacó la diferencia de poder entre las partes, describiendo a Arjuna como una firma boutique de gestión patrimonial con oficinas en Carolina del Norte y Massachusetts, y a Exxon como uno de los conglomerados multinacionales más grandes del planeta.
Los reclamos de Exxon contra Arjuna se basaban en reglas de la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) que permiten a las compañías excluir resoluciones de los accionistas relacionados con operaciones comerciales ordinarias o que sean sustancialmente similares a propuestas ofrecidas en los últimos cinco años. El juez Pittman señaló que la SEC no había actuado adecuadamente en este asunto, pero también indicó que la Corte no podía asesorar a Exxon sobre sus derechos sin un caso activo o una controversia que activara la jurisdicción.
Este fallo subraya la tensión entre grandes corporaciones y accionistas activistas que buscan influir en las políticas ambientales de las empresas.