El ejército israelí lanzó ataques aéreos contra objetivos militares en Irán en represalia a un ataque con misiles balísticos del 1 de octubre, según autoridades israelíes.
Durante la madrugada del sábado 26 de octubre, se escucharon explosiones en Teherán, y las defensas aéreas respondieron. Fuentes locales informaron de al menos siete detonaciones en la ciudad, mientras que medios estatales intentaron minimizar el incidente, desviando la atención a imágenes cotidianas en la televisión nacional. Asimismo, Siria informó de misiles que alcanzaron sitios militares en su territorio, pero sin confirmar víctimas.
Las tensiones en Oriente Próximo se han intensificado, con Israel y el grupo militante Hamás enfrentados desde octubre de 2023. Este ataque marca la escalada más reciente, tras semanas de amenazas israelíes y un contexto de conflictos entre Israel y sus rivales en la región, respaldados por Teherán.
Los ataques israelíes llegan justo después de la visita del secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken, quien advirtió sobre evitar una mayor escalada en el conflicto. Israel había prometido una respuesta “contundente” tras el ataque iraní de octubre, vinculado a sus acciones contra Hezbolá en Líbano.
¿Cuáles podrían ser las repercusiones sobre la economía global?
Irán es el quinto productor mundial de petróleo, y el gobierno estadounidense ha sido insistente en reiterar a Israel que no ataque la infraestructura petrolera iraní, lo cual es una señal clara de las preocupaciones del gobierno Biden sobre las graves repercusiones en el precio del crudo por cuenta de una escalada en las tensiones entre esas dos naciones.
Un alza desmesurada y rápida de los precios del petróleo, afectaría toda la cadena global de suministros y esto podría generar una nueva espiral inflacionaria similar a la ocurrida luego de la reciente pandemia, que llevó a la FED a endurecer su política monetaria y a realizar uno de los más fuertes incrementos del tipo de interés en décadas.
Es el primer día de ataques de Israel como respuesta a la lluvia de misiles lanzados por Irán el pasado 01 de octubre, por tanto es prematuro anticipar un colapso petrolero, sumado al hecho de que hasta el momento Israel ha cumplido con su compromiso de no atacar la infraestructura petrolera Iraní.