Mientras muchos inversores siguen midiendo sus pasos ante un entorno incierto, una empresa ha desafiado todas las expectativas y ha protagonizado un ascenso que pocos vieron venir. Sin campañas ruidosas ni promesas excesivas, Coinbase ha logrado lo impensable: convertirse en la acción con mejor rendimiento del S&P 500 en junio.
El ascenso de la plataforma de criptomonedas no es un hecho aislado. Varios factores se han combinado para catapultarla a la cima: su reciente inclusión en el índice, avances regulatorios favorables y asociaciones estratégicas que han revitalizado la confianza del mercado. Solo en junio, las acciones de Coinbase se dispararon 43%, su mejor desempeño mensual desde noviembre y parte de un repunte trimestral que no se veía desde 2023. El jueves, sus acciones alcanzaron su nivel más alto desde su debut en bolsa en 2021.
El impulso detrás del salto
Uno de los motores clave fue la aprobación de la Ley GENIUS por parte del Senado, que otorga un marco federal a las stablecoins respaldadas por el dólar y amplía la autoridad del Departamento del Tesoro. Esta legislación permite a bancos y fintechs operar con mayor claridad, eliminando uno de los mayores obstáculos para el crecimiento del ecosistema. “Negamos las narrativas falsas sobre Coinbase y la gente está despertando”, dijo Owen Lau, analista de Oppenheimer.
Devin Ryan, director de investigación de tecnología financiera en Citizens, explicó que a pesar del aumento del 44% en junio, la acción tiene más potencial. El motivo: su alianza con Circle Internet Group, emisora de USDC. Desde su salida a la bolsa el 5 de junio, Circle ha crecido más de 500%. Y Coinbase, gracias a un acuerdo de reparto, conserva el 100% de los ingresos por USDC alojados en su plataforma, más casi el 50% de todos los demás ingresos por esta stablecoin.
Un modelo que escala sin cargar costos
Una ventaja clave para Coinbase es que no asume los costos operativos de Circle. Ryan destaca que si el mercado acierta con su visión optimista sobre Circle, entonces Coinbase también se beneficia directamente: “Con la conexión financiera descrita, parece que Coinbase aún tiene mucho más valor”.
Además del trading de criptomonedas, Coinbase ha diversificado sus servicios. Ahora incluye custodia, staking, billeteras y monedas estables. Este mes, lanzó su primera tarjeta de crédito respaldada por criptomonedas en alianza con American Express y anunció integraciones con Shopify. También colabora con JPMorgan en el desarrollo de una “moneda de depósito” sobre su cadena de bloques interna, Base.
Cambia el viento para las cripto
El optimismo sobre una regulación más clara ha reanimado el sector, según Ryan. “Es evidente que se está produciendo un cambio de sentimiento en el mercado de criptomonedas. Los inversores institucionales están entrando, muchos por primera vez, y Coinbase es la forma más directa de invertir en esa tesis”.
Sin embargo, no todo es perfecto. El volumen de operaciones en la plataforma ha mostrado una leve caída desde abril. Para Owen Lau, esto representa un riesgo, aunque confía en que la industria logre avanzar también en la legislación sobre la estructura del mercado, lo que completaría el marco legal para un ecosistema más robusto.
¿Un segundo impulso a la vista?
“El verano de las stablecoins ya está aquí, pero si logramos la aprobación de la Ley CLARITY, veremos el ‘verano de las altcoins’”, anticipó Lau. Según él, ese escenario podría desatar una nueva ola de compras impulsadas por el entusiasmo y la sensación de oportunidad.
Con un entorno legislativo en evolución, un modelo de ingresos escalable y un mercado que comienza a mirar más allá de la especulación, Coinbase podría estar apenas comenzando una nueva etapa de expansión, ahora legitimada por su presencia en el S&P 500.
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