El gigante de bienes raíces WeWork en algún momento estimó que alcanzaría los $65 billones de dólares de valuación en el mercado. De haberse cumplido esta cávala, Adam Neumann, co-fundador de la compañía, pasaría a ser uno de los hombres más ricos del planeta ya que posee una participación del 22% de la firma, lo cual le hubiera significado una fortuna personal de $14 billones de dólares. Sin embargo, al parecer fue una visión demasiado optimista.
Neumann, de 40 años, tendrá que conformarse con una fortuna mucho más modesta. En marzo pasado el inversor inicial Fidelity Investments redujo la valuación de The We Company a $18.3 billones, mucho antes de que Wall Street comenzara a reducir sus propias expectativas.
Recientemente se ha conocido sobre tratos financieros poco ortodoxos entre Neumann y la compañía, los cuales visiblemente favorecían sus intereses. Como si fuera poco también se ha hablado de situaciones de préstamos personales, arrendamientos inmobiliarios y hasta ventas de acciones.
A hoy la valoración de WeWork es de alrededor de $15 billones, según declararon algunos expertos que han estado al tanto de este asunto. Eso dejaría a su CEO con una participación de $3 billones, lo que no es suficiente siquiera para ingresar al listado Bloomberg de los 500 hombres más ricos del planeta.
Desde su fundación, We Co. ha recaudado más de $12 billones y abierto ubicaciones en más de 100 ciudades alrededor del mundo. Adam Neumann mantiene el control de voto a través de una estructura de acciones de tres clases. Ha sido criticado por pedir prestado dinero, arrendar propiedades de su propiedad a la empresa y vender partes de capital antes de la salida a bolsa de la compañía. Según se supo, We Co alquiló a Neumann espacios en cuatro edificios en el que él figura como dueño.
Estos hechos, junto a los millones de dólares en pérdidas, aumentaron la zozobra entre los inversores, quienes ya se habían visto anteriormente decepcionados por la salida a bolsa de otras famosas empresas de Silicon Valley, como fue el caso de Uber Technologies Inc.
WeWork sin embargo no se ha quedado inerme ante semejante situación. Precisamente está preparando importantes cambios en su gobierno con el fin de calmar los ánimos. Algunas medidas ya han entrado en vigor como fue la inclusión de una mujer a su junta directiva y obligar a su CEO a que devuelva los $5.9 millones de intereses de asociación inicialmente otorgados a él como compensación por temas de marca. La compañía y su mayor socio, SoftBank, también están discutiendo si retrasan o no la salida a bolsa.
Las declaraciones negativas del millonario Sam Zell, las malas decisiones de la compañía, las constantes bajas en el cálculo de la valuación total estimada y el miedo generalizado, hacen difícil el panorama para esta empresa.
SoftBank ha destinado $10 billones de dólares a The We Company a través de su fondo VisionFund. La firma nipona trata de evitar una situación como la que vivió con Uber, en el que SoftBank es también uno de sus principales accionistas. Las acciones de la empresa de alquileres de autos han caído cerca de un 30% desde su salida a Bolsa en mayo. Pese a todo, SoftBank aún acumula ganancias ya que cuando invirtió la valoración era de $50 billones y hoy día Uber se encuentra valorada en 56.9 billones, pese a la caída en bolsa.