El Banco Central Europeo (BCE) subió las tasas de interés en un cuarto de punto porcentual y manifestó que continuará con las alzas. Los funcionarios del BCE acordaron aumentar la tasa de depósito clave del banco al 3.5%, el nivel más alto de los últimos 20 años.
En una conferencia de prensa, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, dijo que los funcionarios no están contentos con las perspectivas de inflación y seguirán aumentando las tasas a menos que los datos económicos cambien sustancialmente.
“No estamos pensando en hacer una pausa”, dijo Lagarde. “Creemos que tenemos terreno que cubrir, por lo que no estamos donde queremos estar si queremos alcanzar nuestro objetivo”.
El mensaje agresivo sorprendió a los inversores. El euro creció casi un centavo frente al dólar, a $1.09 dólares luego de ubicarse en $1.08. El índice de referencia Stoxx Europe 600 del continente, bajó un 0.6%. Había decrecido un 0.4% antes de la decisión.
Al otro lado del mundo, la FED acordó mantener estables las tasas pero anunció que al menos habrá dos nuevos incrementos antes de terminar 2023. Esta decisión terminó con una seguidilla de 10 alzas continuas que iniciaron en marzo del año anterior.
Los principales bancos centrales alrededor del mundo están ajustando sus políticas, analizando detenidamente los datos económicos para medir el impacto de los movimientos de tasas anteriores sobre los niveles de inflación.
Los inversores ahora esperan dos aumentos más de las tasas de interés por parte del BCE en los próximos meses. El Banco Central Europeo empezó a subir los tipos más tarde que la FED. Si bien la inflación subyacente en ambas regiones es de alrededor del 5%, ha caído notablemente en EE. UU., pero no en la eurozona.
En el Reino Unido, los inversores ahora esperan cinco aumentos adicionales de la tasa de interés de un cuarto de punto por parte del Banco de Inglaterra después de que la inflación subyacente saltó al 6.8% en abril. Eso empujaría las tasas de interés del Reino Unido al 5.75%.
Por el contrario, el banco central de China recortó una tasa de interés clave esta semana después de que una serie de datos pesimistas mostraran que la economía se desaceleró en mayo y el desempleo juvenil aumentó nuevamente.
“Mientras el desempleo se mantenga cerca de los mínimos cíclicos, es muy poco probable que el BCE cambie de rumbo”, dijo Frederik Ducrozet , jefe de investigación macroeconómica de Pictet Wealth Management en Ginebra.