Alaska Air Group acordó comprar a su rival Hawaiian Airlines en un acuerdo valorado en $1,900 millones de dólares, convirtiéndose en la segunda fusión de aerolíneas en EE. UU. en menos de dos años. Las acciones de Hawaiian cerraron el viernes a $4.86 dólares, han bajado casi un 53% en lo que va del año y su capitalización de mercado es de alrededor de $250 millones.
Alaska pagaría $18 dólares por cada acción de Hawaiian y se haría cargo de $900 millones de deuda, según confirmaron ambas empresas aéreas este domingo.
Este lunes, luego de conocerse la noticia, las acciones de Hawaiian casi se triplicaron llegando a $14.22, aunque todavía por debajo del precio de compra propuesto. Entre tanto los bonos de Alaska perdieron un 14.2% ese mismo día y finalizaron a $34.08 la acción.
Alaska Air había venido incrementando sus frecuencias hacia Hawái en los últimos años, y con esta adquisición se consolidaría como la principal compañía en esa región.
Hawaiian desde principios de 2020 ha registrado pérdidas netas en casi todos los trimestres, mientras que Alaska y otras empresas se han venido recuperando desde el fin de la pandemia.
“Lo que vimos aquí fue una oportunidad única en el tiempo con la valoración que vimos en Hawaiian”, dijo Shane Tackett, director financiero de Alaska Airlines, en una entrevista. Afirmó además que el acuerdo también permitiría a las empresas combinadas convertirse en un “líder del mercado” de viajes premium a Hawái.
Por ahora no solo basta con la intención de ambas compañías ya que deben enfrentar una fuerte oposición del Departamento de Justicia. A principios de este año ese despacho ganó una demanda para romper una asociación regional en el noreste entre JetBlue Airways y American Airlines. También demandaron para bloquear la adquisición de Spirit Airlines por parte de JetBlue Airways. Se espera que este juicio concluya en los próximos días.
Actualmente, cuatro aerolíneas: American, United, Delta y Southwest, controlan alrededor del 80% del mercado estadounidense.
Las dos aerolíneas dijeron que mantendrán sus marcas pero operarán bajo una única plataforma, que combina una flota total de 365 aviones que cubren 138 destinos. Antes del acercamiento con Hawaiian, Alaska Airlines adquirió Virgin America por $2,600 millones en 2016.