El “efecto Google” o amnesia digital, explica cómo el cerebro tiende a olvidar información fácilmente accesible en línea. Según Cynthia Borja, del grupo de expertos The Decision Lab, este fenómeno puede debilitar la memoria, ya que el cerebro tiende a olvidar información que no se utiliza regularmente.
Para contrarrestar este efecto, Borja sugiere dedicar más tiempo y esfuerzo a memorizar información en lugar de depender en exceso de las búsquedas en línea. Este análisis destaca la importancia de equilibrar el uso de la tecnología con la memoria y la necesidad de desarrollar estrategias para retener información de manera más efectiva en la era digital.
Aquí hay tres pasos simples que puede seguir para dejar de usar Google y mejorar su recuerdo:
Haz una pausa antes de coger tu teléfono
Si tienes problemas para recordar algo, no te desesperes. Antes de buscar en Google una respuesta que sabes que has buscado antes, intenta recordarla por ti mismo. Aunque al principio no lo recuerdes y acabes buscándolo en Google, este ejercicio fortalecerá tu memoria con el tiempo y te ayudará a recordar más fácilmente en el futuro.
Escribe lo que quieres recordar
Si encuentras información en línea que crees que querrás recordar más tarde, escribe notas al respecto. Según Borja, tomar notas a mano ayuda a retener mejor la información y te involucra más activamente en lo que estás haciendo. Esta estrategia también ha sido respaldada por expertos como Bill Gates, quien en un Reddit AMA de 2021 mencionó que toma notas escritas a mano mientras lee libros para absorber mejor la información. Para él, esto es fundamental en su proceso de aprendizaje.
Replantea tu pensamiento
Cuando descubras una nueva receta que te guste o aprendas algo que quieras recordar, intenta actuar como si no pudieras buscar esa información la próxima vez. Este cambio de mentalidad puede ayudarte a memorizar mejor las cosas.
Según Borja, es crucial usar la tecnología como una herramienta de apoyo, pero también es importante mantener tu cerebro activo y recordando cosas por sí mismo. Esta práctica de desafiar a tu cerebro se aplica a otras áreas además de las búsquedas en línea. Si dependemos demasiado de una calculadora incluso para las matemáticas básicas, podríamos olvidar conceptos que aprendimos cuando éramos más jóvenes, como las tablas de multiplicar.
Por lo tanto, la próxima vez que prepares tus delicias horneadas favoritas, intenta recurrir a Google como último recurso en lugar de como una solución rápida. Quizás así logres recordar cuántos limones necesitas comprar en la tienda.