La economía estadounidense está mostrando señales de desaceleración en su mercado laboral durante abril. Según el informe publicado el viernes por la Oficina de Estadísticas Laborales del Departamento de Trabajo, las nóminas no agrícolas aumentaron en 175,000 nuevas plazas de empleo, cifra por debajo de las expectativas del consenso, que proyectaban un incremento de 240,000 empleos.
Aunque el aumento del empleo sigue siendo positivo, la tasa de desempleo ha registrado un ligero aumento, alcanzando el 3.9%, frente a las expectativas de que se mantendría estable en el 3.8%. Este fenómeno ha avivado las esperanzas de que la Reserva Federal pueda considerar recortar las tasas de interés en los próximos meses para estimular la economía.
El informe también revela un crecimiento más lento en los salarios, con un aumento del 0.2% respecto al mes anterior y un 3.9% en comparación con el año anterior, cifras por debajo de las estimaciones del consenso. Este dato, aunque positivo para contener la inflación, plantea interrogantes sobre la fortaleza del mercado laboral en Estados Unidos.
Los sectores de atención médica, asistencia social, transporte y almacenamiento, así como el comercio minorista, lideraron la creación de empleo en el mes de abril. Sin embargo, el gobierno, que había mostrado sólidas ganancias en meses anteriores, registró un crecimiento de solo 8,000 puestos de trabajo, muy por debajo del promedio de 55,000 durante los 12 meses anteriores.
Las revisiones de los datos de meses anteriores muestran un aumento del empleo en marzo y una disminución en febrero, lo que sugiere cierta volatilidad en el mercado laboral.
La reacción en Wall Street fue inicialmente positiva, con los futuros vinculados a los principales índices bursátiles aumentando las ganancias tras el informe. Sin embargo, los rendimientos de los bonos del Tesoro cayeron, reflejando una cautela en los mercados financieros ante la posibilidad de una desaceleración económica.
La incertidumbre sobre el futuro de las tasas de interés se ha intensificado después de la reciente reunión de la Reserva Federal, donde se optó por mantener estable la tasa de endeudamiento de referencia. Sin embargo, el presidente de la FED, Jerome Powell, ha señalado que la inflación sigue siendo una preocupación, aunque los datos económicos más recientes indican “una falta de mayores avances” para controlarla.
El informe de empleo de abril plantea preguntas sobre el rumbo de la política monetaria de la Reserva Federal y si se tomarán medidas para contrarrestar la desaceleración del crecimiento económico.
Con una inflación persistentemente alta y un mercado laboral que muestra signos de debilitamiento, los inversores estarán atentos a las próximas decisiones de la FED para orientar sus estrategias financieras.
