La secretaria del Tesoro, Janet Yellen, afirmó el jueves que la creciente deuda nacional de Estados Unidos es manejable siempre que se mantenga en un nivel proporcional al tamaño de la economía.
En una entrevista con la CNBC, ella señaló que las altas tasas de interés están aumentando la carga de la deuda, que actualmente asciende a $34.7 billones de dólares.
Yellen explicó que la clave es estabilizar la deuda en relación con el Producto Interno Bruto (PIB). “Si la deuda se estabiliza en relación con el tamaño de la economía, estamos en una situación razonable”, comentó. Para ella, el verdadero desafío radica en el coste real de los intereses de la deuda, los cuales, durante el año fiscal 2024, ascendieron a $601 mil millones de dólares. Esta cifra supera el gasto en atención médica, defensa y es cuatro veces mayor al destinado a educación.
La Oficina de Presupuesto del Congreso ha emitido múltiples informes advirtiendo sobre los crecientes costos de la deuda y los déficits. Se proyecta que, en la próxima década, la proporción de la deuda nacional en manos del público (actualmente alrededor de $27.6 billones de dólares) alcanzará un nuevo récord en relación con la economía total. Actualmente, esta proporción ronda el 97% del PIB, pero se espera que supere el 100% si continúan las tasas de gasto actuales.
Yellen defendió los planes del presidente Joe Biden para gestionar esta situación, señalando que su presupuesto propone una reducción del déficit de $3 billones de dólares durante la próxima década. Según ella, esta reducción sería suficiente para mantener estable la relación deuda-ingresos y estabilizar la carga de intereses.
El déficit presupuestario para 2024 es de $1.2 billones de dólares, con cuatro meses restantes del año fiscal. En 2023, el déficit fue de $1.7 billones de dólares. Los crecientes costos de financiamiento de la deuda se deben a las tasas de interés elevadas por la Reserva Federal para combatir una inflación que alcanzó su nivel más alto en más de 40 años a mediados de 2022. Aunque la inflación ha disminuido desde entonces, la Reserva Federal ha mantenido altas las tasas de referencia mientras espera más evidencia de que la inflación se está reduciendo de manera convincente al objetivo del 2% del banco central.
Tras su reunión de política monetaria de esta semana, la Reserva Federal indicó que ha visto un progreso “modesto” en la inflación, pero que no está lista para reducir las tasas. Yellen, quien fue presidenta de la Reserva Federal, evitó comentar sobre las acciones actuales del banco central.