Samsung Electronics experimentó un notable aumento en sus acciones, alcanzando su nivel más alto desde enero de 2021, tras anunciar previsiones optimistas para el segundo trimestre.
La compañía espera una ganancia operativa de aproximadamente $10.4 billones de wones, lo que representa un incremento extraordinario del 1,452% respecto al año anterior, superando las expectativas del mercado.
Este desempeño se atribuye principalmente a la explosiva demanda de inteligencia artificial (IA), impulsada por productos como el Galaxy S24 Ultra, que incorpora capacidades avanzadas de IA para edición de fotos y búsqueda en línea.
El negocio de Samsung, como el principal fabricante mundial de chips de memoria, se ha beneficiado significativamente de la recuperación en los precios de los chips de memoria, impulsado por la creciente demanda en el sector de la IA generativa.
Aunque enfrentó pérdidas récord en 2023 debido a la caída global de la demanda de chips y productos electrónicos durante la pandemia de Covid-19, la situación ha mejorado drásticamente. Los chips de memoria de Samsung son cruciales en una amplia gama de dispositivos electrónicos, desde teléfonos inteligentes hasta computadoras, lo que refuerza su posición en el mercado.
Sin embargo, a pesar de estos logros, La compañía ha enfrentado desafíos en la producción de chips HBM (High Bandwidth Memory), un componente esencial para los chipsets de IA. Este retraso ha afectado sus relaciones comerciales con empresas como Nvidia, que está evaluando a Samsung como proveedor potencial de chips HBM.