El estratega principal de políticas de Washington para la firma Stifel, Brian Gardner, ha indicado que existe un 40% de probabilidades de que el presidente Joe Biden no busque la reelección en las próximas elecciones.
El analista Gardner es conocido por asesorar sobre el impacto de las políticas de la Casa Blanca, y ha descrito el momento en el que el Congreso regresa de su receso del 4 de julio como una “semana decisiva” para la campaña del candidato.
Gardner evalúa que hay un 60% de posibilidades de que Biden continúe en su cargo, destacando el carácter del presidente que disfruta desafiando las expectativas de los jóvenes del Partido Demócrata. Cuanto más las élites sugieren que debería retirarse, más decidido parece estar en seguir adelante. Esto subraya la resistencia de él ante la presión interna para abandonar la contienda.
Los demócratas que desean que el mandatario se retire enfrentan una barrera significativa: la falta de influencia directa sobre el presidente. Gardner sostiene que aunque pueden tratar de persuadirlo, no tienen el poder de forzarlo a renunciar. Además, Gardner califica como una fantasía la idea de que una fracción significativa de los partidarios más fieles de Biden podría volverse contra él en el proceso de nominación.
Las preocupaciones sobre la edad de Biden han sido persistentes, especialmente durante su última campaña. Un desempeño pobre en el reciente debate de junio ha intensificado estas preocupaciones, cambiando el tono de la conversación en torno a su candidatura. Las encuestas y los mercados financieros empiezan a reflejar un cambio en el sentimiento que favorece al expresidente Donald Trump.
A pesar de esto, Gardner argumenta que, si Biden decide seguir en la carrera, el Partido Demócrata podría todavía lograr un resultado favorable. Hay un segmento de votantes que nunca apoyará a Trump, independientemente de las circunstancias. Esta aversión inquebrantable hacia Trump podría ser un factor decisivo en la contienda electoral, incluso si él permanece en la carrera.