En una entrevista con Jim Cramer de la cadena estadounidense CNBC, George Kurtz, CEO de CrowdStrike, expresó que la empresa de ciberseguridad está dispuesta a negociar con Delta después de la interrupción masiva en julio, que la aerolínea alegó le costó más de $550 millones de dólares.
Kurtz indicó que CrowdStrike está abierta a conversaciones para resolver la situación con Delta, un cliente importante.
El incidente, causado por una actualización defectuosa, fue descrito como “la mayor interrupción TI de la historia” y también afectó a Microsoft. Delta anunció que no tiene opción salvo reclamar daños. Kurtz reconoció el impacto del problema y aseguró que CrowdStrike intentó solucionarlo.
A pesar de superar las expectativas de Wall Street en ganancias e ingresos, CrowdStrike redujo sus previsiones anuales debido a la interrupción. Kurtz afirmó que la empresa está enfocada en ser transparente y resiliente, y que los clientes han recibido bien sus esfuerzos por garantizar que no se repita el incidente.