Coca-Cola reportó resultados financieros del tercer trimestre mejores de lo esperado, gracias a sus incrementos de precios, que lograron compensar la disminución en la demanda.
La compañía registró ganancias ajustadas de $0.77 por acción, superando los $0.74 proyectados por analistas, y un ingreso ajustado de $11,950 millones, por encima de los $11,600 millones esperados.
Aunque los ingresos netos cayeron en comparación con el año pasado, los ingresos orgánicos crecieron un 9%, a pesar de una disminución del 1% en el volumen de cajas unitarias. La empresa observó una demanda más débil en mercados internacionales como China y Turquía, aunque en América del Norte se mantuvo estable.
Coca-Cola incrementó sus precios en un 10%, con una mayor parte atribuida a países con alta inflación como Argentina. A pesar de la caída en las ventas de algunos productos, como agua embotellada y bebidas deportivas, la compañía mantuvo estable la venta de gaseosas y espera un crecimiento orgánico del 10% en ingresos para 2024.
El gigante de las bebidas presentará sus previsiones completas para 2025 en su próximo informe, aunque ya anticipa que el tipo de cambio será un desafío en sus futuros resultados.