McDonald’s reportó el martes resultados trimestrales que superaron las expectativas de Wall Street, con ganancias de $3.23 por acción e ingresos de $6,870 millones, impulsados por una ligera recuperación en sus ventas en EE. UU., que crecieron un 0.3% en tiendas comparables.
Las ventas globales de la compañía disminuyeron un 1.5%, afectadas por la débil demanda en mercados internacionales como Francia, China y Medio Oriente.
El brote de E. coli relacionado con hamburguesas Quarter Pounder en EE. UU. ha generado preocupación. Aunque aún no se ha confirmado la causa exacta, McDonald’s ha retirado las cebollas del menú en las áreas afectadas y suspendido la relación con su proveedor, Taylor Farms, como medida de precaución.
Pese al ligero aumento en ventas en EE. UU., la compañía ha experimentado una caída en el tráfico de clientes, lo cual atribuye a una mayor prudencia en el gasto por parte de los consumidores. En respuesta, McDonald’s ha lanzado estrategias de marketing, como un menú promocional y ediciones limitadas de productos coleccionables, para captar nuevamente la atención de sus clientes.
Mirando al cuarto trimestre, la compañía está a la expectativa de los efectos que pueda tener el brote de E. coli en sus operaciones en EE. UU., especialmente en un entorno donde los consumidores son cada vez más selectivos con sus gastos.