Microsoft informó el miércoles un rendimiento sólido en el primer trimestre fiscal, superando las estimaciones de Wall Street en ganancias e ingresos, aunque sus previsiones de crecimiento a futuro no lograron impresionar al mercado, lo que resultó en una caída del 4% en sus acciones en las operaciones posteriores al cierre.
Durante el trimestre que terminó el 30 de septiembre, Microsoft registró ganancias por acción de $3.30, superando los $3.10 esperados, e ingresos de $65,590 millones, por encima de la proyección de $64,510 millones. Este aumento del 16% en ingresos y del 11% en beneficios netos se debió en gran parte al éxito en su unidad de productividad, que incluye Office y otros servicios de negocio.
Sin embargo, las proyecciones de ingresos de Microsoft para el segundo trimestre fiscal, entre $68,100 y $69,100 millones, resultaron inferiores a los $69,830 millones esperados por los analistas.
Azure, uno de los pilares de la expansión en la nube de Microsoft, experimentó un crecimiento del 33% durante el trimestre, impulsado por una creciente demanda de servicios de inteligencia artificial, un área en la que la compañía ha invertido de manera significativa, especialmente en colaboración con OpenAI. El negocio en la nube reportó ingresos totales de $24,090 millones, un 20% más en comparación con el año anterior.
El gigante tecnológico sigue intensificando sus inversiones en IA y está en proceso de expandir su infraestructura tecnológica para responder a las necesidades crecientes de computación avanzada.
Los gastos de capital aumentaron un 50% interanual, alcanzando los $14,920 millones. Esta inversión está alineada con su apuesta por IA y computación en la nube, que la compañía considera esenciales para su crecimiento futuro.