Tesla anunció su primer descenso anual en entregas de vehículos desde que comenzó a producir en masa, lo que generó una caída de más del 7% en sus acciones este jueves.
En 2024, la compañía entregó 1,789 millones de vehículos, una cifra inferior a los 1.81 millones de 2023. Durante el cuarto trimestre, Tesla reportó entregas de 495,570 vehículos, por debajo de las estimaciones de analistas que esperaban más de 500,000 unidades.
Los analistas de la industria atribuyen este descenso a diversos factores, incluyendo la creciente competencia de fabricantes como General Motors, Rivian, BYD y Volkswagen, junto con problemas operativos en mercados clave como Europa y China.
En Europa, las ventas de Tesla cayeron un 14% en los primeros 11 meses del año, según datos de ACEA, mientras que en China, el crecimiento del Model Y no logró seguir el ritmo del mercado general de vehículos eléctricos.
Además, la llegada del Cybertruck, el esperado vehículo eléctrico de Tesla, ha generado críticas debido a su elevado precio inicial de $80,000 y acumulación de inventario en lotes de autos usados. Por otro lado, las estrategias de incentivos y recortes de precios en América del Norte no lograron revertir la acumulación de inventarios. Según Patrick George, editor de InsideEVs, Tesla enfrenta desafíos relacionados con la producción de vehículos más accesibles, un segmento crucial para su expansión futura.
Con la presión de mantener su liderazgo en la industria, Elon Musk anunció que Tesla lanzará modelos de menor costo y opciones de conducción autónoma para 2025, con expectativas de crecimiento anual del 20% al 30%. Sin embargo, la incertidumbre sobre la dirección de la compañía, junto con la incursión política de Musk, preocupa a analistas e inversores.