Donald Trump regresa a la presidencia de Estados Unidos con un ambicioso plan que busca implementar cambios significativos desde el primer día de su segundo mandato. Las prioridades de su administración incluyen reforzar la seguridad fronteriza, redefinir la política comercial y tomar medidas que impactarán tanto a nivel interno como internacional.
No te pierdas la transmisión en español que hará Comercio TV este próximo 20 de enero.
Uno de los puntos centrales será la imposición de aranceles a socios comerciales clave. Trump ha propuesto un arancel del 25% a las importaciones de México y Canadá, vinculado a su colaboración en el control de la inmigración ilegal y el tráfico de drogas.
Además, se contempla un arancel del 10% a las importaciones de China, argumentando que es necesario para contrarrestar el impacto de los productos ilegales, incluidos los relacionados con el tráfico de fentanilo. En otras ocasiones Donald Trump ha mencionado aranceles de hasta un 100%. Estas medidas buscan presionar a estos países a tomar acciones más contundentes, pero también podrían generar tensiones comerciales que afecten las cadenas de suministro y encarezcan productos esenciales en Estados Unidos.
En el ámbito interno, el presidente electo ha anunciado su intención de revisar y limitar la política “DEI” (Diversidad, Equidad e Inclusión) en agencias gubernamentales y sectores regulados. Esta política, promovida en la administración previa, buscaba fomentar la representación equitativa y combatir la discriminación en entornos laborales. Trump considera que estas iniciativas han derivado en un enfoque excesivo hacia criterios identitarios y planea reducir su alcance para priorizar lo que él denomina “mérito y eficiencia”. Esta postura podría generar divisiones, especialmente en el ámbito corporativo y educativo, donde estas políticas han ganado terreno en los últimos años.
En el sector energético, Trump busca impulsar la independencia energética del país, revitalizando la producción de petróleo, gas y carbón. Para ello, se espera que elimine restricciones a la perforación en tierras federales y costas, y apruebe proyectos de infraestructura energética detenidos en la administración anterior. Asimismo, se espera un segundo intento de retirarse del Acuerdo de París, subrayando su rechazo a políticas climáticas internacionales que percibe como perjudiciales para la economía estadounidense.
La imposición de aranceles a México y Canadá, indudablemente será un golpe a la estabilidad económica regional tal y como lo anticipa Comercio TV en un análisis que puedes leer aquí. Si se hace realidad esta retórica junto a una posible retoma del Canal de Panamá, las relaciones entre Estados Unidos y América Latina podrían dar un retroceso como nunca antes se había visto.
Con estas decisiones, Trump inicia su mandato con una agenda que promete cambios drásticos y controversiales. Mientras sus seguidores celebran el cumplimiento de promesas de campaña, las medidas propuestas probablemente desencadenarán intensos debates y desafíos tanto en el Congreso como en la arena internacional.