Un cruce de miradas tensas, voces elevadas en el pleno del Senado y una polémica moneda digital vinculada a la familia Trump marcaron una jornada que podría transformar radicalmente el sistema financiero estadounidense. Las criptomonedas, largamente resistidas en los pasillos del Capitolio, acaban de obtener su victoria más significativa.
Rompiendo el bloqueo
El lunes por la noche, el Senado de Estados Unidos votó 66-32 para desbloquear un proyecto de ley que regula las monedas estables, superando el obstruccionismo demócrata que había paralizado el avance de la legislación.
El giro se dio luego de que senadoras pro-cripto como Kirsten Gillibrand y Angela Alsobrooks negociaran cambios clave, aunque no lograron incluir una cláusula que prohíba al presidente Donald Trump y a su familia beneficiarse directamente de estos activos mientras ocupen cargos públicos.
Una moneda estable ligada a los Trump ha alcanzado un valor de mercado superior a los $2,000 millones desde marzo, encendiendo alarmas entre legisladores progresistas como Elizabeth Warren.
Durante la votación, Warren y Gillibrand protagonizaron un fuerte enfrentamiento. “La aprobación de este proyecto de ley implica que podemos esperar que más compradores anónimos, grandes empresas y gobiernos extranjeros utilicen la moneda estable del presidente como una cuenta bancaria oculta”, denunció Warren.
Críticas y respaldo
Aunque el senador Mark Warner calificó la propuesta como “mejor que el status quo”, Warren acusó al proyecto de facilitar el lavado de dinero, los sobornos y el riesgo sistémico. Señaló que, a diferencia de las cuentas bancarias, las monedas estables no tienen respaldo del seguro federal, lo que podría exponer a los usuarios a pérdidas masivas si un token colapsa.
Los bancos también expresaron su preocupación por la fuga de depósitos, aunque obtuvieron una victoria: se prohibió que las monedas estables ofrecieran intereses. El CEO de Coinbase, Brian Armstrong, criticó esta medida, afirmando que las monedas estables podrían convertirse en una alternativa bancaria legítima.
La presión de la industria
La industria cripto ha invertido más de $40 millones en campañas y lobbies, apuntando a reemplazar figuras clave como el senador Sherrod Brown por defensores como Bernie Moreno. Stand With Crypto ya declaró que esta será una votación clave en su sistema de evaluación.
Mientras tanto, los minoristas celebran. Con más de $187,000 millones gastados en comisiones de tarjetas en 2023, esperan que las stablecoins ofrezcan una vía más económica y rápida para sus transacciones. El proyecto ahora se dirige a la Cámara, donde deberá fusionarse con una legislación más amplia antes de llegar al escritorio de Trump.
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