Elon Musk presentó la última actualización del cohete de próxima generación de la compañía, construido para llevar humanos al espacio profundo, incluyendo la luna y marte. “Esta es la cosa más inspiradora de la que he sido parte”, dijo.
“Creo que podríamos ver a las personas volar el próximo año, y esperamos orbitar en unos seis meses”, confirmó el CEO y fundador de SpaceX.
El video fue publicado el lunes en la cuenta oficial de la compañía en redes sociales, y se muestra las últimas novedades del prototipo. En Twitter hay una versión de 14 segundos donde aparecen las instalaciones internas de la nave mientras Musk hace un pequeño tour.
Elon Musk reconoce que “en el mundo hay muchos problemas que requieren atención” pero a la par, piensa que la humanidad también necesita de “proyectos que la entusiasmen”.
La nave mide 50 metros de alto, pesa 200 toneladas y fue construida en acero inoxidable. El cohete masivo representa el sueño de la compañía de construir un vehículo que sea reutilizable, que además podrá transportar hasta 100 personas fuera de la órbita terrestre.
Un prototipo llamado Starship Hopper, recientemente realizó un vuelo corto a baja altitud. SpaceX ha estado probando este cohete en sus instalaciones de Texas y, el pasado viernes, terminó de ensamblar su primera versión de Starship.
El sistema de lanzamiento llamado Starship Super Heavy consta de dos etapas. Las dos fases son Starship MK1 y Super Heavy.
Super Heavy es la primera fase de la estructura y está compuesta por 37 motores Raptor. Por su parte, el Starship MK1 integra un total de tres motores Raptor, pero la versión final tendrá seis. A diferencia del Falcon 9, se propulsará con metano y oxígeno y no con nitrógeno.
“Estamos construyendo naves espaciales lo más rápido que podemos … va a ser muy loco ver un montón de estas cosas” dijo Musk.
“El avance crítico necesario para convertirnos en una civilización espacial es hacer que los viajes espaciales sean como los viajes aéreos”, dijo el multimillonario. “creo que sería muy emocionante tener una base en la Luna”, aunque solo sea para investigación.
En el evento se develó que la nave tendrá patas de aterrizaje para poder regresar y aterrizar en posición vertical, de manera muy similar a como lo hacen actualmente sus cohetes Falcon 9.
“La mejor decisión de diseño en Starship es el uso de acero inoxidable, debido a su resistencia cuando es sometido a temperaturas extremas”, dijo Musk.
Explicó que el cohete Starship, cuando ingrese a la atmósfera terrestre a alta velocidad, solo necesitará protección térmica adicional en un lado del cohete, “porque el acero puede resistir una temperatura mucho más alta”. Además, tiene un costo significativamente bajo en comparación a otros materiales. Originalmente iba a construirse con fibra de carbono, que habría costado $130,000 por tonelada, sin embargo, el acero inoxidable, en comparación, cuesta $2,500 por tonelada. Es decir, “fue alrededor del 2% del costo” según declaró Musk.
“Podemos ir a otros lugares del sistema solar, como Saturno, pero creo que lo más importante, en lo que debemos centrarnos es en el camino más rápido hacia una ciudad autosuficiente en Marte”, afirmó Musk. “Parece que la conciencia es una cosa muy rara y preciosa y debemos dar todos los pasos que podamos para preservar la luz de la conciencia”. “La ventana se ha abierto para convertirnos en una civilización multiplanetaria”, puntualizó.