La reducción promedio en las contribuciones mensuales de los estadounidenses a las cuentas de ahorros de emergencia es de $243, y los millennials hacen el mayor recorte: $289. Alrededor de un tercio de los adultos contribuyen menos a sus fondos de emergencia para poder cubrir sus gastos diarios, según una investigación de New York Life Insurance Company.
Un fondo de emergencia es un ahorro que se tiene sin una destinación puntual. Si tenemos un gasto imprevisto que requiere atenderse de manera urgente, entonces se utilizará el fondo de emergencias.
Dylan Huang, director de soluciones de gestión de patrimonio y jubilación de New York Life, dijo: “Si bien es preocupante que el aumento de los costos de los bienes cotidianos y los gastos regulares puedan desinflar el colchón financiero, este entorno significa que los hogares están tomando decisiones calculadas sobre cómo ajustar su estrategia financiera de manera que tenga más sentido para ellos”.
La inflación interanual en EEUU se sitúa en un 8.3 %, según la medición más reciente de la Oficina de Estadísticas Laborales. Aunque eso es ligeramente inferior al pico de marzo del 8.5%, sigue siendo el ritmo anual más rápido en unas cuatro décadas y muy por encima del objetivo de la Reserva Federal del 2%.
En un entorno económico hostil donde la escasez y los altos precios se han vuelto la norma, los fondos de emergencia son utilizados con cada vez más frecuencia para cubrir aquellos costos que con el ingreso normal ahora no se pueden solventar.
Más allá de la reducción de las contribuciones de ahorro de emergencia, la inflación también está provocando que los hogares retrasen algunas metas financieras: aplazar las vacaciones (33%), pagar la deuda de la tarjeta de crédito (22%), comprar un automóvil (22%) y comprar una casa (16%), según la investigación de New York Life.
“Entre los que aún no se han jubilado, estamos viendo que este grupo hace los ajustes necesarios en sus estrategias financieras sin permitir que la ansiedad a corto plazo descarrile sus planes de jubilación”, dijo Huang.
Al mismo tiempo, los ahorros a largo plazo se están viendo menos afectados: el 72% de los encuestados dijeron que aún esperan jubilarse a la edad deseada.
La Reserva Federal elevó la tasa de interés dos veces este año en un esfuerzo por reducir el ritmo de la inflación y se espera que continúe creciendo este año. La idea es que a medida que aumenta el costo de los préstamos, los consumidores controlarán sus gastos y la menor demanda de bienes y servicios resultante reducirá los aumentos de precios.