Sony Interactive Entertainment ha revelado planes para despedir a alrededor de 900 empleados de su división PlayStation, lo que representa el 8% de su fuerza laboral global.
Jim Ryan, presidente y CEO de la unidad, justificó esta decisión como necesaria para impulsar el crecimiento empresarial. Los recortes afectarán a empleados en todas las regiones de la empresa, con el cierre completo del estudio de PlayStation en Londres y el impacto en varios otros estudios.
Esta medida sigue a la revisión a la baja de las ventas de la consola insignia PlayStation 5, con una previsión de ventas reducida de 21 millones a 25 millones de unidades para el año fiscal que finaliza en marzo.
La reacción en el mercado fue notable, con una caída abrupta en las acciones de la compañía.
Aunque se había especulado sobre el lanzamiento de una versión actualizada de la PlayStation 5, para revitalizar el interés en la consola, los despidos han sido la última de una serie de medidas en la industria tecnológica, incluyendo los recientes recortes en Microsoft y otras empresas.