En respuesta a las crecientes restricciones impuestas por Estados Unidos contra el acceso de China a tecnologías avanzadas, Microsoft ha ofrecido a sus empleados de inteligencia artificial y computación en la nube basados en China la opción de trasladarse a otros países. Según un informe del Wall Street Journal, la propuesta abarca a entre 700 y 800 ingenieros chinos especializados en aprendizaje automático y otras áreas de computación en la nube, ofreciéndoles la posibilidad de trasladarse a lugares como Estados Unidos, Irlanda, Australia y Nueva Zelanda.
Un portavoz de Microsoft confirmó a la cadena que la compañía ha compartido una oportunidad de transferencia interna opcional con un subconjunto de empleados. Sin embargo, no se proporcionaron detalles específicos sobre el número exacto ni la afiliación del personal afectado. Se enfatizó que la empresa sigue comprometida con la región y que las posibles transferencias no afectarían sus operaciones en China ni en otros mercados donde tienen presencia.
La medida de Microsoft surge en un contexto de intensificación de los esfuerzos estadounidenses para evitar que China desarrolle tecnologías avanzadas de inteligencia artificial que podrían ser utilizadas con fines militares. Durante los últimos dos años, Estados Unidos ha implementado diversas restricciones que limitan la capacidad de China para adquirir chips avanzados y equipos de fabricación necesarios para entrenar modelos de IA. Además, la administración Biden está considerando imponer nuevas barreras a la exportación de modelos avanzados de IA, como el modelo de lenguaje grande detrás de ChatGPT, respaldado por Microsoft.
A pesar de la falta de supervisión gubernamental que impida a las empresas estadounidenses vender o ofrecer servicios de modelos de IA a entidades extranjeras, Estados Unidos teme que estas tecnologías puedan ser utilizadas para ciberataques o la creación de armas biológicas.
Este año, Microsoft publicó un informe que indicaba que hackers respaldados por Rusia, China e Irán han estado utilizando herramientas de OpenAI para mejorar sus habilidades y apoyar sus campañas de hacking.
La empresa cofundada por Bill Gates ha estado presente en China durante más de tres décadas y mantiene en ese país su mayor centro de investigación y desarrollo fuera de Estados Unidos.
Esto es notable, dado que muchas otras empresas tecnológicas occidentales han sido expulsadas de China debido a regulaciones estrictas. La oferta de traslado a sus empleados en China refleja el intento de equilibrar su presencia global con las crecientes tensiones geopolíticas y las restricciones tecnológicas impuestas por su país de origen.