La jornada del primer lunes de julio fue turbulenta para las acciones de Chewy, el minorista de productos para mascotas, impulsadas por la revelación de que Keith Gill, conocido como “Roaring Kitty”, adquirió una significativa participación en la empresa.
Esta compra de más de 9 millones de acciones, representando un 6.6% de la compañía, lo convierte en el tercer mayor accionista de Chewy. La noticia inicialmente provocó un aumento del 9% en las acciones, pero pronto se vieron presionadas a la baja, cerrando con una caída del 6.6%.
Gill, reconocido por su papel en la manía comercial de GameStop en 2021, ha estado activamente involucrado en los movimientos del mercado, anteriormente revelando una gran posición en la empresa de video juegos.
Aunque la relación entre Gill y Chewy ha despertado interés, particularmente después de una publicación en redes sociales que hizo subir las acciones de la compañía hasta un 34%, existe incertidumbre sobre si la financiación para esta nueva adquisición provino de la venta de su participación en la empresa de video juegos.
La conexión entre la cadena de tiendas de videojuegos GameStop y el minorista de productos para mascotas en línea es notable, dado que Ryan Cohen, ex CEO y fundador de Chewy, desempeñó un papel crucial en su salida a bolsa.
Cohen, ahora CEO de la cadena de tiendas de videojuegos GameStop, ha liderado la transformación de la empresa hacia el comercio electrónico, atrayendo a Gill y otros ejecutivos del minorista de productos para mascotas en línea a la junta directiva de la cadena de tiendas de videojuegos en 2021.
En medio de estos desarrollos, Gill ha enfrentado desafíos legales, incluida una demanda por presunto fraude de valores relacionado con la manipulación de precios de acciones. Aunque esta demanda fue retirada recientemente, refleja las controversias que rodean las estrategias de mercado de Gill y su influencia en línea sobre los inversores minoristas.