En junio, la economía de EE.UU. creó 206,000 empleos, superando las expectativas, aunque la tasa de desempleo subió al 4.1%, informó el Departamento de Trabajo. Este incremento en las nóminas no agrícolas, aunque positivo, es menor que el ajuste de mayo, que se revisó a 218,000 desde 272,000.
La tasa de desempleo aumentó inesperadamente, alcanzando su nivel más alto desde octubre de 2021. Esto genera incertidumbre para la Reserva Federal en sus próximas decisiones sobre política monetaria. Según Jan Hatzius de Goldman Sachs, el reporte sugiere un “aterrizaje suave” y podría indicar un recorte de tasas en septiembre.
La participación en la fuerza laboral subió al 62.6%, y la tasa de empleo para personas entre 25 y 54 años alcanzó el 83.7%, la más alta en 22 años. La tasa de desempleo más amplia se mantuvo en 7.4%.
En junio, se destacaron 70,000 empleos en el sector público, 49,000 en salud y 34,000 en asistencia social, mientras que los sectores de servicios profesionales y comercio minorista vieron descensos.
Las ganancias promedio por hora subieron un 0.3% mensual y 3.9% anual, cumpliendo las expectativas. La semana laboral promedio se mantuvo en 34.3 horas.
El aumento del desempleo de larga duración fue notable, con 1.5 millones de personas afectadas, frente a 1.1 millones el año pasado. La tasa de desempleo para trabajadores negros subió al 6.3%, y para asiáticos al 4.1%.
La Reserva Federal, que mantiene su tasa de interés entre 5.25% y 5.50%, sigue evaluando datos económicos. Aunque el crecimiento del PIB es bajo, los mercados anticipan dos recortes de tasas antes de fin de año, mientras que los funcionarios de la Fed planean solo uno, condicionado a datos favorables adicionales.