La reconocida empresa de pruebas genéticas 23andMe, alguna vez valorada en $6,000 millones, se ha declarado en bancarrota bajo el Capítulo 11, según documentos presentados el domingo en un tribunal federal de Missouri. La decisión marca el desplome de una compañía que fue pionera en los kits caseros de ADN y que llegó a cotizar en bolsa en 2021 con una valoración de $3,500 millones.
En un movimiento sorpresivo, Anne Wojcicki, cofundadora y directora ejecutiva, anunció su renuncia inmediata al cargo, aunque seguirá formando parte del consejo de administración.
“Hemos tenido muchos éxitos, pero también asumo la responsabilidad de los desafíos que enfrentamos hoy”, escribió en una publicación en X. A pesar de las dificultades, aseguró que su “fe en la empresa y su futuro es inquebrantable”.
El nuevo director ejecutivo interino será Joseph Selsavage, actual director financiero y contable. La compañía, ahora con una capitalización bursátil de apenas $25 millones, tiene previsto vender sus activos si el tribunal aprueba su plan. Wojcicki incluso planea presentar una oferta propia para adquirir la empresa.
Los problemas financieros se suman a las crecientes preocupaciones por la privacidad. En 2023, un hackeo comprometió los datos de casi 7 millones de usuarios, lo que llevó al fiscal general de California a recomendar eliminar la información genética del sitio.
A pesar del proceso de quiebra, 23andMe aseguró que continuará operando normalmente y mantendrá sus políticas actuales sobre protección de datos.
Mantente al día en la actualidad financiera con Comercio TV: