El ejército de los Estados Unidos ha gastado al menos $1.6 millones para derribar tres objetos voladores no identificados, que según informaron este miércoles las propias fuerzas de defensa, eran probablemente globos recreativos. Esto en referencia a los incidentes presentados sobre Alaska, el territorio canadiense de Yukon y el lago Huron.
Esa cifra se calculó teniendo en cuenta únicamente los cuatro misiles AIM-9X Sidewinder, utilizados para lograr el derribo. No incluye el costo de la Marina, la Guardia Costera, la Guardia Nacional de Alaska y las fuerzas canadienses para los esfuerzos de búsqueda de los escombros, lo que probablemente aumentaría el valor a cientos de miles de dólares adicionales, dijeron los funcionarios.
El avión que adelantó la misión sobre el Lago Huron falló su primer disparo y usó un segundo Sidewinder para derribarlo. Cada misil costó al menos $400,000 dólares, dijeron funcionarios de defensa.
El gobierno estadounidense anunció el viernes que había suspendido la búsqueda de los restos de los tres artefactos derribados.
Los vuelos realizados no son parte de las estimaciones de costos porque el ejército los considera parte del entrenamiento de sus pilotos y esas horas de vuelo están incorporadas en el presupuesto regular, confirmaron funcionarios de defensa.
Los agentes de la Oficina Federal de Investigaciones han entrevistado a personas inscritas a grupos de aficionados a los globos y otras agremiaciones, pero aún no han llegado a conclusiones definitivas sobre la cuestión.
La administración Biden ha dicho que luego de la última evaluación se piensa que los artefactos probablemente no representaban ninguna amenaza inminente para la seguridad nacional.
“La evaluación actual de la comunidad de inteligencia es que estos tres objetos probablemente eran globos vinculados a empresas privadas, instituciones recreativas o de investigación que estudian el clima o realizan otras tareas científicas” afirmó el presidente Biden.
El Comando Norte, responsable de las operaciones militares en América del Norte, defendió el manejo que dieron a este asunto, argumentando que estos objetos voladores no identificados, amenazaron el tráfico aéreo comercial porque flotaban a la misma altura en la que transitan la mayoría de rutas.
La coronel de la Fuerza Aérea Elizabeth Mathias, vocera de NORAD y del Comando Norte de EEUU dijo que “Las capacidades utilizadas para realizar las operaciones dirigidas por el presidente el 10, 11 y 12 de febrero, incluyeron las fuerzas existentes en NORAD y equipos adicionales aprobados por el Secretario de Defensa”.
La preocupación por los objetos voladores no identificados comenzó a principios de febrero, cuando el ejército rastreó lo que creía era un globo de vigilancia chino sobre América del Norte y lo derribó con un misil Sidewinder mientras se dirigía al océano frente a las Carolinas.
Posteriormente, las fuerzas militares iniciaron una búsqueda basada en datos de radar sin procesar, llevándolos a detectar los tres artefactos que luego fueron derribados sobre Alaska, Canadá y el Lago Huron.
El miércoles, el Pentágono publicó sus primeras fotos, tomadas por los pilotos, del presunto globo chino que voló sobre Estados Unidos. La imagen lograda el 3 de febrero, muestra una gran esfera blanca con una carga debajo. Un avión de combate F-22 derribó el presunto globo chino al día siguiente.
No se pudo determinar si los Estados Unidos publicará fotos de los tres objetos voladores que hasta ahora no han sido identificados.