Es muy fácil que las personas puedan sentirse ofendidas, y al apresurarnos, corremos el riesgo de expresarnos de manera equivocada.
John Bowe es formador de oratoria, periodista galardonado y autor de “Tengo algo que decir: dominar el arte de hablar en público en una era de desconexión”. Ha colaborado con The New Yorker, The New York Times Magazine, GQ, McSweeney’s, This American Life y muchos otros.
Para este experto, integrar cualquiera de las siguientes expresiones en su comunicación diaria, le otorgará habilidades de etiqueta superiores a la mayoría:
1. “Lo que entiendo de lo que dijiste fue…”
La idea no es que concuerdes en todo momento con las opiniones de los demás, la clave está en hacer que se sientan escuchados y comprendidos. Esta frase no solo aclara su comprensión, sino que también les brinda la oportunidad de organizar sus ideas y contribuir de manera más significativa a la conversación.
2. “Tal vez tengas un punto válido.”
Esta declaración permite el desacuerdo de manera diplomática, como cuando se sugiere una nueva idea después de reconocer la perspectiva del otro. También resulta útil para abordar comentarios fuera de lugar o las observaciones de amigos entusiastas que suelen hablar mucho. Evitar contradicciones directas facilita conversar sin conflictos innecesarios.
3. “Estabas en lo correcto, me equivoqué.”
Esta frase destaca por su generosidad en la interacción verbal, por dos razones cruciales:
– No puedes pronunciar estas palabras a menos que las sientas genuinamente.
– Son música para los oídos de quienes las escuchan.
Además de aliviar la tensión, esta declaración permite un reinicio, fomentando relaciones más respetuosas y auténticas al dejar a un lado el ego.
4. “Aprecio que hayas hecho esto…”
Este enfoque clásico y sencillo trae consigo elegancia. En un mundo donde la gratitud y el reconocimiento son escasos, es valioso ser generoso con los elogios. Reconocer y agradecer el buen comportamiento contribuye a fomentar una cultura de aprecio.
5. “Dejaré que te encargues de eso.”
En ocasiones, lo más beneficioso es resistir el impulso de querer controlar todo. Si alguien está ocupado con una tarea, confiar en su habilidad y ofrecerles espacio es un gesto de confianza. Esta declaración se pronuncia con sinceridad y acompañada de una sonrisa.
6. “¿Podrías ayudarme con algo?”
Más efectivo que dar órdenes es pedir una mano de manera respetuosa. En lugar de decir “Saca la basura”, un enfoque más efectivo sería expresar, “Estoy abrumado. ¿Podrías ayudarme con la basura?”
7. “¡Tu [pelo/camisa/corbata, etc.] luce muy bien hoy!”
Esta frase reconoce el esfuerzo de los demás por mejorar. Aunque a veces disimulemos, todos apreciamos los elogios. En un mundo donde las preocupaciones sobre la apariencia son comunes, es un gesto positivo recordar a alguien que está haciendo algo bien.
8. “Eso resulta interesante.”
Esta combinación de palabras invita a una pausa, mostrando respeto hacia el hablante antes de continuar la conversación. Es un reconocimiento de que lo dicho fue escuchado y considerado.
9. No responder en absoluto.
Cuando se enfrente a comentarios desagradables, practique la paciencia. En lugar de responder de inmediato, tome una respiración profunda y trate las palabras como si fueran un problema ajeno y aléjese.