Las ventas de viviendas usadas en EE. UU. disminuyeron un 2.5% en agosto en comparación con julio, situándose en 3.86 millones de unidades, según la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (NAR).
Esta cifra, inferior a lo esperado, representa una caída del 4.2% frente a agosto de 2023 y marca tres meses consecutivos con ventas por debajo de los 4 millones de unidades anuales.
El descenso se vincula a contratos firmados en junio y julio, cuando las tasas hipotecarias rondaban el 7%, bajando luego al 6.7% hacia finales de julio, según datos de Mortgage News Daily.
“El reciente descenso en las tasas hipotecarias, sumado al aumento del inventario, podría revertir esta tendencia en los próximos meses”, señaló Lawrence Yun, economista jefe de la NAR.
En cuanto a inventarios, las viviendas disponibles aumentaron un 0.7% en agosto, alcanzando 1.35 millones de unidades, un 22.7% más respecto al año anterior. Aun así, la oferta sigue siendo limitada, con sólo 4.2 meses de inventario.
Pese a la caída en ventas, los precios continúan al alza. El precio medio de una vivienda en agosto fue de $416,700, un 3.1% más que en 2023, estableciendo un récord para ese mes. Las viviendas de más de $750,000 fueron las que más aumentaron en ventas, mientras que las de menos de $500,000 experimentaron descensos.
Los compradores primerizos representaron solo el 26% de las transacciones, igualando el mínimo histórico de noviembre de 2021.