El endeudamiento de los estadounidenses por préstamos para automóviles está alcanzando niveles preocupantes, según un informe de Edmunds.com.
La deuda promedio subió a $6,458 en el tercer trimestre, frente a los $6,255 del trimestre anterior y $5,808 del año pasado. Estos préstamos, donde el valor del vehículo es inferior al monto adeudado, reflejan la creciente presión financiera sobre los consumidores en EE.UU.
Un aumento en las tasas de morosidad en los préstamos para autos es una señal clara de esta tensión, con cifras que ya superan los niveles previos a la pandemia de COVID-19. Mientras que pequeños desfases en el valor del vehículo no son críticos, el 22% de los prestatarios debe más de $10,000, y el 7.5% supera los $15,000, una situación que Edmunds califica como alarmante.
Las tasas de interés y los altos precios han contribuido a este problema, sumado a las compras en 2021 y 2022 cuando la pandemia causó escasez de inventarios y disparó los precios. Muchos consumidores pagaron más de lo habitual por sus vehículos, que se depreciaron rápidamente.
Para evitar mayores pérdidas, es aconsejable que los propietarios mantengan sus vehículos por más tiempo y realizar un mantenimiento adecuado.
Según expertos, la clave está en evitar préstamos a largo plazo si no se tiene la intención de conservar el auto durante años, ya que los préstamos a siete años pueden llevar directamente a un patrimonio neto negativo.