Nada parecía augurar una mejora significativa para Boeing tras años marcados por crisis internas, accidentes mortales y revisiones regulatorias. Sin embargo, las últimas cifras revelan un giro que pocos anticipaban.
CEO promete que 2025 será el “año de recuperación”
El segundo trimestre trajo un cambio notorio para el fabricante estadounidense: Boeing redujo su pérdida neta a $176 millones, en comparación con los $1,090 millones perdidos en el mismo periodo del año anterior. En palabras del CEO Kelly Ortberg, “el cambio lleva tiempo, pero estamos empezando a ver una diferencia en nuestro desempeño en toda la empresa”. Añadió además que, con enfoque en “la seguridad, la calidad y la estabilidad”, la compañía está encaminada a hacer de 2025 “nuestro año de recuperación”.
La mejora también fue visible en los ingresos, que crecieron 35% hasta alcanzar $22,750 millones, superando las expectativas del mercado. Ajustando por partidas extraordinarias, Boeing registró una pérdida de $1.24 por acción, mejor que los $1.48 proyectados por analistas. Este resultado incluyó un cargo de $445 millones relacionado con el acuerdo con el Departamento de Justicia sobre los accidentes del 737 Max.
Ortberg también confirmó en CNBC que esperan generar flujo de caja en el cuarto trimestre. En cuanto a producción, la compañía alcanzó las 150 entregas trimestrales, nivel que no lograba desde 2018, el último año con ganancias anuales. “Queremos mantenernos estables en 38 al mes y luego trabajar con la FAA para aumentar la tarifa”, dijo Ortberg, en referencia a los 737 Max, cuya producción ya está en el máximo permitido.
Crisis persistente en defensa y certificaciones aplazadas
Pese a las señales de recuperación, los desafíos persisten. Boeing retrasó la certificación del 737 Max 7 y el Max 10 hasta 2026, una decepción frente a la promesa de Ortberg de lograrlo en 2025. Además, la unidad de defensa enfrenta posibles huelgas, luego de que 3,200 empleados rechazaran una nueva oferta laboral.
En contraste, las divisiones de defensa y espacio crecieron 10%, con ingresos superiores a $6,600 millones, mientras que el negocio de servicios avanzó 8%, hasta $5,300 millones. El mercado permanece expectante a nuevas señales de estabilidad, a la espera de la conferencia ejecutiva donde Ortberg detallará los próximos pasos.
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