La demanda por vehículos usados fue más fuerte en enero de lo esperado, provocando un alza en los precios, según Cox Automotive. El índice de valor de vehículos usados de Manheim, firma de datos automotrices, subió un 2.5% en enero comparado con diciembre siendo el mayor incremento mes a mes desde noviembre de 2021.
El valor de los coches usados entre 2020 y parte de 2022 tuvo una tendencia al alza, ya que durante la pandemia la fabricación de nuevas unidades cayó dramáticamente por cuenta de la crisis en la cadena de suministros, obligando a los compradores a recurrir al mercado de segunda mano.
Este mercado se ha convertido cada vez más en un punto de interés para la administración Biden como un barómetro para aliviar la inflación, por tanto no son buenas noticias para la Reserva Federal.
Recordemos que la compra de vehículos, ya sean nuevos o usados, tiene un gran peso en los presupuestos familiares, por tanto ejercen una presión significativa en el índice de precios. A principios del año pasado, el gobierno de los EEUU culpó al mercado de coches de segunda mano como parte del problema de las crecientes tasas de inflación.
El índice de valor de vehículos usados de Manheim había registrado una disminución del 15% a finales del año pasado, ya que los compradores se abstuvieron de comprar debido a los precios récord.
El coste promedio de cotización de un auto de segunda mano fue de $27,143 en diciembre, casi un 4% menos que el mismo periodo de 2021.
Cox Automotive dijo el mes pasado que el mercado de vehículos usados se había estabilizado, asemejándose a niveles de pre-pandemia, con un inventario estable y precios cayendo desde sus máximos históricos.