En 2024, la riqueza de los multimillonarios alcanzó cifras nunca vistas, con un aumento combinado de $13 billones a $15 billones en tan solo un año, según el informe de desigualdad de Oxfam. Este crecimiento sin precedentes ha despertado alarmas sobre la concentración de poder económico y la desigualdad global, en un contexto donde el 1% más rico controla el 45% de la riqueza mundial, mientras el 44% de la población vive con menos de $6,85 al día.
El informe, titulado “Takers Not Makers”, subraya que el 60% de la riqueza de los multimillonarios proviene ahora de herencias, monopolios y conexiones privilegiadas, lo que ha acelerado la acumulación de fortunas inmerecidas. Según Oxfam, el rápido crecimiento de estas fortunas podría dar lugar a cinco billonarios en la próxima década, con Elon Musk proyectado como el primero en alcanzar esta marca en 2027, gracias a su fortuna actual de $440,000 millones.
El regreso de Donald Trump a la Casa Blanca y el inicio del Foro Económico Mundial en Davos han intensificado el debate sobre la necesidad de reformas globales. Mientras líderes mundiales discuten posibles soluciones, Oxfam insta a ajustar las políticas fiscales y disolver monopolios para garantizar que los más ricos paguen su parte justa.
“La acumulación de riqueza extrema en manos de unos pocos no solo es dañina para la economía, sino también para la humanidad”, afirmó Amitabh Behar, director de Oxfam Internacional, destacando que la desigualdad perpetúa una nueva aristocracia global.