El presidente Donald Trump ha revelado planes para imponer aranceles de al menos 25% a la importación de automóviles, semiconductores y productos farmacéuticos. Desde su club Mar-a-Lago en Florida, el mandatario advirtió que estos impuestos podrían “subir sustancialmente más en el transcurso del año”, dejando claro que su estrategia comercial será aún más agresiva.
Trump señaló que las empresas estadounidenses tendrán “una pequeña oportunidad” para trasladar su producción a territorio nacional antes de la entrada en vigor de los aranceles, aunque no especificó plazos ni detalles sobre esta transición.
Hasta ahora, la administración ya había advertido sobre medidas proteccionistas en sectores clave para la seguridad nacional, pero no se conocía el nivel exacto de los nuevos impuestos. La semana pasada, Trump confirmó aranceles del 25% al acero y aluminio importados, además de un aumento del 10% a los productos chinos.
El gobierno también evalúa una política comercial “recíproca”, que igualaría los aranceles estadounidenses con los impuestos y restricciones impuestas por otros países. Mientras tanto, la Unión Europea se prepara para responder: el comisario de Comercio, Maróš Šefčovič, visitará Washington esta semana para discutir los conflictos comerciales.
Trump dejó la puerta abierta para negociaciones, pero insistió en que su objetivo es establecer un comercio justo. “Eso pondría a las naciones en el mismo campo de juego”, afirmó. Aún no está claro si los aranceles a los autos incluirán exenciones para Canadá y México, ya que la administración ha considerado proteger vehículos bajo el Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá firmado en 2020.
Mantente al día sobre la actualidad financiera solo aquí en Comercio TV: