Delta Air Lines ha recortado sus expectativas de ingresos y beneficios para el primer trimestre de 2025, citando una disminución en la demanda interna en Estados Unidos. Este ajuste ha generado preocupación en la industria de viajes, sugiriendo posibles ventas mediocres en ciertos segmentos del sector.
La aerolínea ahora anticipa que los ingresos para el trimestre que finaliza el 31 de marzo aumentarán hasta un 5% en comparación con el año anterior, una reducción respecto a la previsión anterior de crecimiento del 6% al 8% emitida en enero. Además, ha ajustado su previsión de ganancias ajustadas a un rango de 30 a 50 centavos por acción, desde la orientación previa de 70 centavos a 1 dólar por acción. Estas noticias provocaron una caída de más del 13% en las acciones de Delta durante las operaciones posteriores al cierre, tras una disminución superior al 5% en la sesión regular del lunes.
La compañía atribuye este ajuste a una reciente disminución en la confianza de consumidores y empresas, causada por una mayor incertidumbre macroeconómica, lo que ha debilitado la demanda interna. El CEO de Delta, Ed Bastian, declaró al programa “Closing Bell” de CNBC que, aunque no anticipa una recesión, ha observado una debilitación en la confianza del consumidor, lo que ha llevado a una reducción en las reservas tanto de clientes de ocio como de negocios.
Bastian también mencionó que las preocupaciones sobre la seguridad han exacerbado el impacto en la demanda, refiriéndose a la colisión mortal entre un avión regional y un helicóptero del Ejército en enero en Washington, D.C., así como al accidente de Delta al aterrizar en Toronto el mes pasado, que no resultó en fatalidades.
El miedo de los migrantes ante políticas de Trump desalienta la demanda
Una hipótesis plausible es que el temor de millones de inmigrantes a ser deportados esté contribuyendo a esta tendencia.
Bajo la administración actual, las políticas migratorias se han endurecido, incrementando las amenazas de deportaciones masivas. Este ambiente ha generado ansiedad y miedo entre las comunidades inmigrantes, llevándolas a limitar sus desplazamientos para evitar interacciones con las autoridades.
Informes recientes indican que las amenazas de deportación están afectando la salud mental de los inmigrantes y sus familias, quienes ya enfrentan una presión psicológica significativa.
Es razonable inferir que, dentro de Estados Unidos, los inmigrantes indocumentados o aquellos con estatus migratorio precario eviten viajar en avión por temor a ser detenidos en aeropuertos, donde la seguridad es estricta y la verificación de identidad es obligatoria. Este comportamiento precautorio podría estar contribuyendo a una menor demanda.
Aunque no se dispone de datos específicos que vinculen directamente la disminución en la demanda de vuelos internos con el miedo a la deportación, la correlación entre políticas migratorias estrictas y cambios en el comportamiento de viaje de las comunidades afectadas sugiere que este factor podría estar influyendo en las recientes tendencias observadas por Delta Air Lines.
Mantente al día en la actualidad financiera con Comercio TV: