Southwest Airlines, famosa por su política de equipaje gratuito, ha decidido dar un giro inesperado. A partir del 28 de mayo, la aerolínea comenzará a cobrar a sus pasajeros por facturar maletas, salvo para clientes de tarifas superiores y miembros élite. La noticia marca el fin de una era y alinea a la compañía con sus rivales, quienes generaron más de $5,000 millones en tarifas de equipaje el año pasado.
El cambio llega tras la presión de Elliott Investment Management, un inversor activista que ganó cinco puestos en la junta directiva y exigió reformas. “Lo que ha cambiado es que nos hemos dado cuenta de que necesitamos más ingresos para cubrir nuestros costos”, explicó Andrew Watterson, director de operaciones de Southwest.
Southwest aún no ha revelado el costo de la tarifa, pero en aerolíneas como Delta, United y American, facturar una maleta cuesta $35. También lanzará una tarifa económica básica, que restringirá beneficios y cambiará la acumulación de millas en su programa de recompensas.
Además, la aerolínea ha implementado drásticas medidas de ahorro, despidiendo a 1,750 empleados y eliminando rutas no rentables. Estas iniciativas buscan generar $800 millones en ganancias este año y $1,700 millones en 2026.
Bob Jordan, CEO de Southwest, aseguró que esta decisión permitirá a la aerolínea seguir siendo competitiva, aunque su impacto en la lealtad de los clientes aún está por verse.